Chetumal, Q. Roo, Domingo 06 de Septiembre de 2020, poderycrítica.- La Asociación Mexicana de Hábitats para la Interacción y Protección de Mamíferos Marinos (AMHMAR) reveló que “Daniel”, el manatí, sufrió una severa desnutrición que le ocasionó la pérdida del 50 por ciento de su peso. Esta condición de salud fue motivada por la escasez de recursos económicos para la compra de alimento complementario durante la emergencia sanitaria por Covid-19.
Los problemas de salud de salud de “Daniel” fueron detectados desde hace cuatro meses, cuando pobladores de la zona donde permanece el mamífero (el poblado de Laguna Guerrero) reportaron al Centro de Atención y Rehabilitación de Mamíferos Acuáticos (CARMA)y a El Colegio de la Frontera Sur (Ecosur), que era notoria la pérdida de peso.
La AMHMAR, al conocer la situación se ofreció a colaborar, incluso con un médico veterinario, Roberto Sánchez Okrucky, quien se unió al equipo de expertos que ya estaba atendiendo al manatí.
La valoración médica reveló que el mamífero marino había perdido alrededor del 50% de su peso corporal y mostraba un severo cuadro de desnutrición.
La AMHMAR donó los recursos monetarios para la compra de la alimentación complementaria del animal, sumando en 4 meses la cantidad de mil 500 kilogramos de vegetales frescos que han sido suministrados por personal de CARMA.
El estado de salud del manatí “Daniel” ha mejorado paulatinamente, recuperó peso y actitud. El mamífero mide 2.31 metros de longitud y pesa alrededor de 210 kilogramos.
En estos momentos está en cautiverio temporal, sin embargo en breve será reintegrado al Área Natural Protegida del Santuario del Manatí de la Bahía Chetumal. Se le colocará un transmisor con el que los expertos rastrearán su posición para monitorear su estado de salud.
“Daniel”, es un manatí reintroducido a esta área natural en 2004, luego de ser rescatado en las aguas de la comunidad de Laguna Guerrero, en 2003.
El ejemplar requiere que su dieta sea complementada con lechuga orejona y romana, acelga, espinaca, brócoli, calabaza, papa, zanahoria, betabel, jícama, plátano, manzana y pera. El animal está acostumbrado a recibir alimentación cada 3 horas, 6 veces al día en cantidades específicas sumando el 10% de su peso corporal, lo cual es una regla general para la especie.
Sin embargo, a causa del cierre de actividades debido a la Pandemia de la COVID-19, los recursos monetarios para la compra del alimento del manatí “Daniel” escasearon.