PODER Y CRÍTICA | REDACCIÓN | La intensa oleada de calor y la sequía prolongada han causado estragos en los cultivos de plátano en Cunduacán, Tabasco, donde los pequeños productores reportan la pérdida de entre 500 y 700 hectáreas. Ramiro Morales Yedra, presidente de la Asociación de Platanera del Poblado Cucuyulapa, informó que de las mil 500 hectáreas de plátano macho, manzano y guineo, más del 50% han sido destruidas.
Las plantas, que antes mostraban un vibrante verde, ahora lucen marchitas y enfermas debido a las altas temperaturas y la falta de lluvia. La sequía, que este año se prolongó de tres a seis meses, ha secado las plantas y quemado los frutos, afectando gravemente la economía local.
Esta situación ha impactado a miles de familias que dependen de estas plantaciones, tanto directa como indirectamente. La pérdida de cultivos ha llevado a la cancelación de empleos, obligando a muchos trabajadores a emigrar en busca de sustento.
Morales Yedra destacó la necesidad urgente de insumos como fertilizantes granulados, productos foliares, hormonas y resina para resembrar. Hizo un llamado a las autoridades municipales, estatales y federales para activar programas de apoyo que permitan rescatar esta actividad esencial para Cucuyulapa.
Finalmente, recordó que Cucuyulapa es el segundo polo platanero de Tabasco, después de Teapa, y subrayó la importancia de que los tres órdenes de gobierno intervengan para salvar esta actividad económica crucial para la región.