MIGUEL AVENDAÑO | PODER Y CRÍTICA | El pasado 11 de mayo la «Mafia Verde» que lidera Jorge Emilio González Martínez y coordinada por el diputado Gustavo Miranda García, impusieron como dirigente del PVEM en Cozumel a su ex Secretario General en la Junta de Gobierno y Coordinación Política (JUGOCOPO) de la XVI Legislatura, Renán Sánchez Tajonar.
Cual vil mafiosos y al estilo siciliano, allanaron el camino para que su alfil estuviera presto a ocupar un cargo en la administración municipal y poder disponer de los recursos del erario municipal.
Y así fue, Pablo Bustamante dirigente estatal del PVEM se refirió a Renán Sánchez Tajonar como “un hombre íntegro, con raíces bien profundas en nuestro Estado, profesional en las tareas que ha tenido encomendadas, que ha trabajado en beneficio de Quintana Roo, hombre de palabra con excelentes propuestas para la transformación de nuestra tierra y hoy con el compromiso de ser nuestro dirigente en esta bella isla”.
Hay que acotar, que en el evento participaron los candidatos a presidenta municipal, Juanita Alonzo y el candidato a diputado federal, Juan Carrillo; Juanita, sin querer avaló los acuerdos políticos que la «Mafia Verde» había acordado con Pedro Joaquín Delbouis para seguir detentando el poder y apoyar los intereses del Verde, una alianza que atentaba contra ella misma y que hoy la tiene cercada.
Y es que «La Mafia Verde» y Gustavo Miranda enviaban a su operador con miras a que tuviera presencia en la isla y su futuro nombramiento no fuera impugnado. Renán Sánchez en esa ocasión aseguró que su compromiso es con los ciudadanos, por ello “gestionaré la construcción del mejor partido en el Estado y trabajaremos por lograr un mayor desarrollo turístico, Cozumel es herencia de nuestra más grande cultura y vamos a seguir en esta encomienda de poder contribuir a un nuevo bienestar y poner al PVEM en el lugar que le corresponde».
Y aún más, se le tiro al suelo a Morena y al presidente Obrador: “Vamos con Andrés López Obrador y a seguir fortaleciendo la Cuarta Transformación con mayores recursos presupuestales que garanticen la recuperación integral y mantenimiento del desarrollo turístico de la isla y hacer la gran diferencia en las urnas el 6 de junio”, sostuvo.
Los mafiosos cobijandose en los principios de honestidad de la Cuarta Transformación cuando en la práctica son la antítesis de los postulados de López Obrador; ellos, que practican los despojos, el robo, la simulación y la mentira son como agua y aceite en la alianza que nuevamente se propone en Quintana Roo y que no pinta con buenos resultados.
Los acuerdos y negociaciones de Gustavo Miranda con sus aliados tuvieron sus frutos y el 1 de octubre Sánchez Tajonar fue designado en la primera sesión ordinaria del cabildo, Secretario General del Ayuntamiento. Juanita dobló la cerviz ante la «Mafia Verde».
La sesión fue realizada inmediatamente después de la solemne, en la que Juanita Alonso Marrufo rindió protesta como presidente municipal; «La Mafia Verde» festejó a lo grande y Gustavo Miranda giro la primera instrucción: tener el control de las arcas municipales y trabajar con los recursos públicos para ir formando su candidatura a la presidencia municipal.
Pero no todo fue miel sobre hojuelas, la votación para su nombramiento fue dividida, con nueve en favor y dos en contra, luego que el ex presidente municipal y ahora regidor Pedro Joaquín Delbouis afirmara que no cumplía con los cinco años de residencia que pide la ley. Pedro Joaquín, al igual que muchos actores políticos, recibió la puñalada trapera de Gustavo Miranda, por ello atacaba a su empleado recién nombrado segundo al mando en la isla.
La ley es clara y muy específica en temas de elegibilidad para algún puesto de elección popular o cargo público y en el caso de la Secretaria General del ayuntamiento de Cozumel son 5 años mínimo de vecindad en el municipio para poder desempeñar dicho puesto algo que Renan Sánchez Tajonar no cumplía ya que todavía en 2017 era ciudadano vecino del municipio de Benito Juárez.
“Mi nombramiento como secretario general del ayuntamiento de Cozumel es legal y si alguien piensa lo contrario puede proceder ante las instancias correspondientes, lo cual nos permitirá probarlo”, recalcó Renán Eduardo Sánchez Tajonar, quien defendió así su puesto.
Existe una denuncia en la que se le acusa de haber tramitado dos credenciales de elector y de acuerdo a la legislación vigente, el Instituto Nacional Electoral (INE), puede pedir una sanción de seis años de prisión y hasta 300 días de multa para un ciudadano al que se le compruebe hacer uso de dos o más credenciales de elector.
CARRERA DELICTIVA
El 25 de octubre de 2016, Rafael Pacchiano Alamán, entonces secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales, nombró a Renán Eduardo Sánchez Tajonar como delegado de la SEMARNAT en Quintana Roo.
En aquella ocasión el titular de la dependencia federal pidió al funcionario entrante «desempeñarse con responsabilidad y honestidad en el cumplimiento de sus tareas, priorizando el cuidado del medio ambiente en beneficio de las presentes y futuras generaciones como parte de las políticas ambientales del Gobierno de la República», y desde ese momento hizo todo lo contrario, Sánchez Tajonar ya servía a la «Mafia Verde» desde la Unidad de Ecosistemas y Ambientes Costeros de la misma delegación.
A su paso por la delegación, la devastación de manglares en la zona hotelera de Cancún tuvieron su mayor auge, el ecocidio sentó sus reales y grandes cadenas hoteleras como la Riu se beneficiaron a cambio de sobornos y acciones legaloides que le permitieron devastar grandes extenciones de reservas naturales afectando el ecosistema así como la laguna Nichupté: 14 denuncias aculó su administración 10 de ellas encabezadas por la sociedad civil que reclamaba un alto a la destrucción de los maglares y el sistema lagunar.
Con el fenómeno de la arribazón del sargazo, Sánchez Tajonar, fue acusado de actos de corrupción en los contratos para la limpieza de las algas y fue duramente cuestionado por la efectividad de las barreras de contención del fenónemo natural.
Sánchez Tajonar cabildeó para que sólo dos empresas fueran contratadas para la instalación de las barreras: Arco y Goimar, quienes entregaron magros resultados y al final la SEMAR entreó al relevo.
La Semarnat nunca estuvo pendiente de que se cumplieran al pie de la letra los lineamientos emitidos en el 2014 para el retiro del sargazo mediante métodos que no afectaran el medio ambiente costero, fue la Procuraduría de Protección al Ambiente de Quintana Roo, quién entró al quite sancionando a una empresa que no siguió los lineamientos para el retiro de sargazo en Tulum y seis «llamados de atención» en varios municipios del estado por que «recogieron el sargazo con maquinaria pesada que no es la adecuada y no dieron aviso para llevarlo a otro lugar distinto de los puntos de disposición final del sargazo establecidos por la Secretaría de Medio Ambiente del estado”.
Sánchez Tajonar tenía un red de corrupción que controlaba todos lo concerniente a las obras de la zona hotelera y las contingencias ambientales; la protección al medio ambiente, la ecología se convirtió en bandera del Partido Verde…Pero bandera de corrupción.
Hoy, Renán Eduardo Sánchez Tajonar, empleado de Gustavo Miranda y al servicio de la «Mafia Verde» ya tejió una red de corrupción con proveedores y contratistas, muchos de ellos viejos conocidos de la JUGOCOPO, hasta en la compra de un clip, esta metida esta mafia que tiene cercada a la alcaldesa y se despacha con la cuchara grande en Cozumel.