La dos veces campeona mundial acusa al organismo de haber ensuciado su carrera y su trabajo por ignorancia o tabúes debido a su androginia
PODER Y CRÍTICA | REDACCIÓN | Tras asegurar que los argumentos utilizados por el Consejo Mundial del Boxeo (CMB) en México para quitarle sus dos campeonatos mundiales han quedado descartados con pruebas científicas, la boxeadora Alejandra ‘Tigre’ Jiménez Ayala demanda al organismo por discriminación, lesbofobia, misoginia y los que resulten.
Además, iniciará en los próximos días un movimiento nacional para garantizar la justicia y la equidad de las mujeres en el deporte, toda vez que de manera recurrente sufren de malos tratos y poca visibilización, en especial quienes tienen una orientación sexual distinta o cuentan con una expresión de género diverso, como es su caso.
En entrevista, la pugilista anunció su retiro por la violencia sistemática que ha sufrido desde 2016 con afectaciones físicas, económicas y emocionales por ignorancia o tabúes que todavía existen en especial en contra de las mujeres que destacan en disciplinas deportivas.
“Han ensuciado mi carrera y mi trabajo, por eso me voy a dedicar a limpiar mi nombre y cambiar la estructura machista que tenemos”, apuntó.
Al respecto, recordó que ha sido excluida en promocionales, campañas mercadotécnicas y eventos diversos por no usar vestido y no tener el estándar de femineidad que en algún momento piden las empresas, pese a ser la primera mexicana en lograr el Campeonato Mundial de Peso Completo.
Por si fuera poco, también ha sufrido el acoso por parte de algunas de sus contrincantes y medios deportivos que han cuestionado incluso si ella es hombre transgénero y de ahí sus múltiples éxitos.
Sin embargo, en 2020 luego de adjudicarse el Campeonato mundial de Peso Supermedio se le aplicaron pruebas de laboratorio en las que presuntamente salió positiva a una especie de esteroide, por lo que le fue retirado el título y suspendida por algunos meses que se convirtieron en dos años.
La atleta relató que en el lapso mencionado no hubo respuesta para recuperar su título y además en enero de este año se le aplicó un nuevo examen antidoping que resultó “positivo” a la ingesta de anfetaminas.
“Hubo muchas inconsistencias, todo mi esfuerzo y mi trabajo de bajar de peso (33 kilos) todo el trabajo de mi equipo, los sacrificios de todo lo estaban pateando, además de lo que yo me había ganado, se les hizo tan fácil decir: Como eres andrógina, como eres masculina seguramente utilizas substancias androgénicas ¿quién les da el derecho? Y aunque demostré lo contrario, adiós campeonato”, comentó.
Ante ello, la atleta de 35 años tomó la decisión de retirarse del boxeo pues considera que no existen las condiciones para luchar abajo del ring contra toda una estructura misógina, machista, lesbófoba y discriminatoria en todos sentidos.
Lo importante, dijo, “es hacer visible mi caso para que resurjan más casos similares y esto provoque que haya una reestructuración de las cosas, que pueda haber un cambio”.
Lamentó a la vez que se piense que para hacerte fuerte se requiere de la ayuda de algún fármaco o sustancia. “Siempre he sido andrógina pero me gusta verme fuerte, masculina, soy mujer, soy lesbiana y me encanta, entreno ocho horas diarias diferido en distintas disciplinas y el resultado a mí me encanta”.
‘La Tigre’ Jiménez señaló que la suya es de las peores injusticias que se han cometido en toda la historia del deporte, por esto tomó la difícil decisión de no pelear más en un ring pero sí lo hará para limpiar su nombre y visibilizar este tipo de prácticas que son recurrentes en México y el mundo.