Bogotá, 15 Agosto; poderycrítica.- Los comandantes de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) que negocian en La Habana, son ahora más realistas en comparación con los frustrados diálogos de paz, de décadas anteriores, aseguró el experto en derecho internacional humanitario, Alvaro Villarraga.
«Hay un gran giro histórico en la comandancia de las FARC en ese empeño de dialogar para lograr acuerdos con el gobierno. Es sorprendente el cambio y el avance político. Sus discursos reflejan que van claramente a la vida civil», sostuvo Villarraga, director de la división de Acuerdo de la Verdad del estatal Centro de Memoria Histórica.
Villarraga, es un estudioso de todos los procesos de paz que se han desarrollado en Colombia, y conoce personalmente a los comandantes de las FARC que se encuentran en La Habana, en donde recién sostuvo un encuentro con algunos de los jefes insurgentes.
«Ahora se ven unos discursos que de manera clara van a la vida civil. Que de manera clara dan cuenta de la convicción que no triunfó el proyecto revolucionario (por la vía armada)», subrayó en entrevista con Notimex.
Reiteró que las FARC, y en particular su equipo negociador ya están mentalizados para dar el salto de la vida armada a la civil y comprendieron que «necesario inscribirse en un proceso político» para buscar cambios, y reformas sociales desde escenarios democráticos.
Insistió que las posiciones de las FARC en estos diálogos en el gobierno de Juan Manuel Santos marcan una diferencia radical con los procesos anteriores donde fracasaron los diferentes intentos de diálogos entre 1984 y 2002.
En la década de los años 90 del siglo XX, «vimos a las FARC sentadas con el gobierno de la época, construyendo una metodología y un proceso que en su momento fue importante apostando a través de las audiencias públicas a numerosos intercambios».
«A todas luces era unas FARC, que experimentaba la posibilidad de un proceso de paz. Pero mantenían la estrategia de reclutamiento, fortalecimiento y ofensiva estratégica militar a todo nivel».
El gobierno de Andrés Pastrana (1998-2002), época en que se desarrollaron los diálogos de San Vicente del Caguán, en el sur de Colombia, las FARC, «mantuvieron más una estrategia de guerra y fueron menores las expectativas políticas junto a una crisis humanitaria».
En las negociaciones de paz a mediados de la década de los años 80 -explicó Villarraga- se dio el primer intento de negociaciones de forma conjunta con otros grupos rebeldes como el M19 y el EPL, pero las FARC nunca dieron el paso decisivo hacia la paz, además fue un proceso que contó con «un rechazo muy fuerte de las elites en Colombia».
«Es claro que en los 80 las FARC ni física, ni mentalmente salió del monte. Es una guerrilla netamente campesina (…) hoy las FARC están en el preámbulo para dar el paso a una vida política legal», enfatizó Villarraga.
El avance de la negociación en La Habana, que ya está en ajuste para la firma del Acuerdo Final de Paz, pone a las FARC de «cara al cumplimiento de los acuerdos y a su paso a la vida civil lo que conlleva un gran desafío político y social hacia el futuro, incluso con su propia base guerrillera.
La agenda que negocia el gobierno con las FARC, desde noviembre del 2012, «tiene más realismo político. Ya no se sienten en capacidad de desafiar el Estado con exigencias mayores o rompemos y seguimos en la lucha armada».
«Hoy se sienten unas FARC convencidas de pasar a la vida civil y un acumulado militar que les permite avanzar hasta cierto punto pero también en una lógica que les permite ver que hay unos logros pero también unas limitaciones en cada uno de los puntos de la negociación que han asumido con mucha seriedad y entereza», resaltó.