PUERTO MORELOS | El onceavo municipio de Quintana Roo sufre una crisis que lo arrastra a un trágico destino, todo esto dado a que la conducción de su destino está en manos de un puñado de ignorantes, improvisados, pero sobre todo ambiciosos, dispuestos a todo por poder saquear unos centavos, empezando por quien ostenta la presidencia municipal Blanca Merari Tziu Muñoz y su Secretario particular Abraham Masegosa Raña, quien llegará por un fraude electoral orquestado desde la 23 de enero, con el uso de toda la fuerza del estado de modo descarado, compra de votos, acoso a opositores, uso de la delincuencia, la marina, policías, empleados de los tres niveles de gobierno empadronados para votar ahí ese día, pero registrados en sus fuentes de trabajo en Benito Juárez curiosamente todos en el gobierno, gente armada de civiles, directores estatales repartiendo dinero, entre muchas cosas más.
Está situación de empoderamiento a llega al grado de que sienten que son dueños del municipio y del erario, que las personas que laboran en el ayuntamiento son sus empleados personales, que pueden insultarlos, agredirlos, amenazarlos sin consecuencias, al grado de retener los salarios finiquitos y otras prestaciones hasta por 3 años, obligando a empleados a firmar renuncias voluntarias, recibiendo extorsionistas en comercio de familiares y muchas cosas más.
Blanca Merari llegó al gobierno con muchas ambiciones y rodeada de muchos compadres corruptos con historiales de terror en la administración pública.