PACO LLANOS.
Poder&Crítica, 7 de marzo de 2017.
De acuerdo al Instituto Tabasqueño de Transparencia y Acceso a la Información Pública (ITAIP); a nivel estatal, Tenosique, Tabasco, es el municipio que enfrenta más quejas ciudadanas contra su Presidente Municipal, Francisco Ramón Abreu Vela, por ocultar deliberadamente información pública, al retener datos importantes y sensibles sobre el manejo de los recursos al interior del ayuntamiento que preside.
Los encubrimientos van en varios sentidos: sueldo del personal, gastos programados, licitación y ejecución de obras públicas, etcétera.
Gracias a documentos filtrados por trabajadores inconformes de la misma institución -de quienes protegemos sus identidades, ante el temor de represalias en su contra- se da cuenta veraz de las irregularidades que desde hace poco más de un año vienen sucediendo en el Ayuntamiento Municipal.
En el acta de cabildo no. 28, se puede observar de manera clara cómo se autoriza una deuda contraída con Banobras por casi $15 millones 899 mil 999.60 pesos, con el objetivo de supuestamente realizar numerosas “adecuaciones” en los proyectos OP 076, 094, 096, 097, 098, 099, de los cuales, por cierto, no se sustentan con la documentación adecuada. Cuando sumamos las cantidades de cada proyecto individual, éstas no coinciden con la deuda contraída, ya que hay un sobrante de más de $8.5 millones, los cuales no especifican su concepto, destino o aplicación. Simplemente desapareció.
Lo que es peor, no sólo parece extraviarse dinero sin razón alguna en el Ayuntamiento de Tenosique, sino que lo hace a la vista y bajo el consentimiento del cuerpo entero de regidores, ya que la firma de todo el cabildo se aprecia en el documento, con excepción de los regidores perredistas César Augusto López Hernández y Guadalupe del Carmen Bojorquez Javier.
Otro caso se encuentra en el acta no. 27, al apreciarse conceptos ambiguos que no explican realmente en qué se aplicarán los recursos que se desglosan. El concepto se repite varias veces en distintas partes del acta como “Recursos por aplicar de los ingresos de gestión 2016” seguido por otro que menciona “erogaciones complementarias”, en donde se asignan montos que van desde los $184 mil hasta los $4 millones 900 mil pesos.
También está el tema del presupuesto asignado al año para las distintas áreas del Ayuntamiento, el cual se aprueba por $18 millones 998 mil pesos tan sólo para la oficina de presidencia, especificados como “gastos de operación”. Para Abreu Vela, que declara que “gana tan sólo 20 mil pesos al mes”, la cantidad mencionada es totalmente desproporcional. Tal vez sólo así puede explicarse por qué puede costear las visitas y los safaris que organiza para políticos y otras personas de la socialité tabasqueña. En la cabecera municipal ya son conocidas sus fiestas y bacanales a puerta cerrada, donde está de más mencionar lo que sucede en ellas. También sus constantes paseos en bote particular en horas laborales, para admirar el paisaje a orillas del Río Usumacinta, junto a su equipo cercano y mujeres con quien sostiene relaciones extramaritales.
La Secretaría del Ayuntamiento, de hecho, programa gastos aún más elevados, por $25 millones 540 mil 351.35 pesos, poco más de $18 millones igualmente para “gastos de operación” y uno más que llama la atención, denominado “modernización e innovación tecnológica” por más de 6 millones de pesos. Un gasto muy curioso, que constrasta con las quejas generalizadas del personal de la institución a causa de la falta constante de material y equipo, así como el pésimo estado de los aparatos de cómputo con los que cuentan para trabajar.
Esto significa que tan sólo el Presidente Municipal y su Secretario del Ayuntamiento ejercen al año más de 36 millones de pesos en gastos de operación propios de su trabajo.
Analicemos un viaje a la Ciudad de México por motivos de trabajo. Un boleto redondo cuesta por interjet en promedio $3 mil 500 pesos; la noche en un hotel de 4 estrellas, $1,500; más otros $3,000 pesos en promedio para gastos de alimentación, hacen un total de alrededor de $8,000 pesos por 2 días de estadía en dicha ciudad. Esto, para una persona promedio, sabemos que es un gasto holgado.
Para que Pancho Abreu justificara los más de $18,000,000, tendría que viajar más de 6 veces al día a esta ciudad, y aparte pagar la habitación de hotel en cada una de esas visitas. Es, a simple vista, un insulto al intelecto humano la manera en la que tratan de justificar y programar este tipo de cantidades monetarias.
Tal vez el caso más triste se encuentra en el campo, en donde se supone que Abreu Vela es especialista, al ser Ingeniero Agrónomo. Los programas para impulsar el rubro agropecuario están en ruinas o son relativamente inexistentes. Tan sólo por comparar, en el programa para el desarrollo de huertos familiares se invirtieron $200 mil pesos durante todo el año 2016, mientras que para el Carnaval y los festejos navideños se ejercieron más de $6 millones de pesos, tan sólo de diciembre a febrero.
No hay mayor evidencia de la falta de visión y experiencia para gobernar un Municipio que ésta. Para Pancho Abreu no es importante el desarrollo del campo, o de la infraestructura. Sus órdenes de prioridades se encuentran al revés, de una manera obscena, retorcida, que raya en la locura y el absurdo.
Son muchos más los casos concretos que hoy podemos citar como evidencia del proceder de uno de los alcaldes más jóvenes de Tabasco. Parece ser que el término “jóven” es ahora sinónimo de corrupción voraz, tal como lo han demostrado los casos de ex-gobernadores y otros políticos de similar edad a lo largo y ancho del país, quienes se han visto envueltos en escándalos de corrupción y desfalco al erario público.
Es muy evidente la manera en la que ilícitamente se está enriqueciendo él, sus familiares y allegados. Recientemente salieron a la luz datos sobre presuntos aviadores y familiares cercanos que actualmente “laboran” o simplemente cobran sin tener cargo alguno en la institución; con un gasto que asciende a más de 1 millón de pesos al mes. Los nombres expuestos iban desde tíos, sobrinos, primos en primero y segundo grado, hasta ex alcaldes municipales y operadores políticos al servicio de su estructura electoral, la cual ya se encuentra operando para él con miras en una posible reelección (la cual ve cada vez más lejos, ante el rechazo general de la ciudadanía y la nueva ley ratificada del IEPCT).
En la historia de Tenosique, es difícil comparar a este alcalde con otros que se han desempeñado de manera similar, ya que ninguno antes que él había incrementado la deuda pública del municipio, la cual se espera que siga aumentando a niveles insostenibles.
Mientras en Tenosique hacen falta fuentes de empleo, inversión privada, estímulos de Gobierno para reactivar al campo y proyectos para industrias sustentables, Francisco Abreu Vela y sus directores toman los impuestos de los tenosiquenses como fuente de recursos ilimitados.
Están también los autos de lujo, los jeeps adquiridos a inicios del año anterior, las lanchas deportivas con precios millonarios, la compra de una casa de lujo en Mérida, la construcción de un hotel de 25 mdp, así como la compra de ranchos en Tabasco, Campeche y Quintana Roo. Abreu tiene actitud de príncipe griego, de “mirrey” fresa y ranchero derrochador, incapaz de entender que mientras los meses de su administración siguen avanzando .y con ello el enojo de la gente-, sus posibilidades de reelección se ven cada vez más imposibles. Escándalo a escándalo, borrachera a borrachera, el alcalde de Tenosique construye cada pieza de su futuro político, veredicto final de los ciudadanos: Fracaso Total.