PODER Y CRÍTICA | REDACCIÓN | La Comisión Federal de Electricidad (CFE) ha alertado sobre un incremento significativo en las lluvias debido al fenómeno meteorológico conocido como «La Niña.» Según las predicciones, se espera que las precipitaciones en el Sistema Hidroeléctrico Grijalva sean hasta un 50% superiores a la media histórica entre agosto y noviembre.
En un comunicado reciente, la CFE informó que los modelos de predicción indican que durante los próximos cuatro meses, las lluvias en el sureste del país superarán el nivel histórico. Este incremento puede tener implicaciones significativas para la región, especialmente para la infraestructura hidroeléctrica y las comunidades aledañas.
«Las precipitaciones estarán por encima del promedio histórico, lo cual nos obliga a tomar medidas preventivas rigurosas para asegurar la operación segura de nuestras presas y garantizar la seguridad de las comunidades cercanas,» explicó un portavoz de la CFE.
Con el fin de mitigar los posibles impactos del fenómeno «La Niña,» la CFE está coordinando una serie de medidas de seguridad que se implementarán antes, durante y después de las lluvias intensas. Entre las acciones preventivas, la CFE ha establecido políticas y volúmenes de extracción de los embalses que buscan proteger tanto a la población como a la infraestructura de las presas.
Algunas de las medidas destacadas incluyen:
- Pruebas de izaje de compuertas: Se llevan a cabo pruebas para asegurar el funcionamiento adecuado de las compuertas de los vertederos.
- Revisión de equipos: Los equipos principales se someten a revisiones para asegurar su operación óptima y la integridad de la infraestructura civil.
- Monitoreo constante: La CFE realiza un monitoreo permanente de los niveles de agua en los embalses, manteniendo un control estricto sobre las condiciones meteorológicas y los niveles de las presas.
Durante los eventos meteorológicos, la CFE se compromete a monitorear las condiciones las 24 horas del día. Esto incluye el seguimiento del desarrollo de las lluvias, los acumulados de precipitaciones, y la evolución de los niveles de agua en presas y embalses.
Cuando los niveles de agua aumentan, la CFE, en colaboración con el Centro Nacional de Control de Energía (CENACE) y la Comisión para el Manejo de Presas del Río Grijalva (CMPRG), ajusta la generación de energía en embalses de rápida respuesta como Chicoasén y Peñitas. Además, se implementa la reducción o cierre de extracciones de los grandes embalses de Angostura y Malpaso para manejar eficientemente los niveles de agua.
En situaciones donde es necesario, la CFE no descarta la apertura de vertedores conforme a la Política de Operación de Vertedores. Sin embargo, la empresa enfatiza que su máxima prioridad es la seguridad de la población y la protección de las comunidades cercanas.
La CFE reitera su compromiso de mantener informadas a las comunidades afectadas y de coordinarse con las autoridades locales para asegurar una respuesta efectiva ante cualquier eventualidad. La empresa asegura estar preparada para enfrentar los retos que el fenómeno «La Niña» pueda presentar en los próximos meses.
Con estas medidas, la CFE busca minimizar el impacto del fenómeno climático y garantizar el bienestar de las personas que residen en las zonas cercanas a las presas y embalses del sistema hidroeléctrico.